Crónica Aída 10x16

"The ping pong theory"

Por tercera semana consecutiva Aída ha vivido un doble capítulo pero tranquilos, a partir de este domingo las aguas vuelven a su cauce y solamente se emitirá un capítulo.

Durante el primer capítulo vemos como Barajas y Luisma nos vuelven a mostrar lo tontos que son al confundir el ping pong con Pin y Pon, y es que los dos amigos se han apuntado al torneo del barrio. El problema les llega cuando Barajas es malo hasta decir basta jugando, por lo que Paz se presta para jugar después de que su gran amor se lo pida. Pero no todo es tan fácil, para ocultar quién es la nueva pareja Paz se tiene que disfrazar de hombre. Entre que la mujer se prueba un traje y otro vemos como se pasa de patética llamando a Luisma desnuda y regañándolo por mirarla. Esperemos que pronto solucionen este tema por el bien de todos y más aún cuando Ainhoa no hace acto de presencia por el barrio. Al final Luisma y Paz quedan finalistas junto a Barajas y Fidel y no queda claro cuál de los dos gana ya que Fidel está dispuesto a perder al descubrir a Paz y que el viaje es para dos personas a París.

Soraya tiene un retraso, pero no del que todos pensáis e incluso su familia y amigos, no es mental sino un retraso en la regla. La chica se lo quiere ocultar a Chema ya que es un manojo de nervios y no lleva bien eso de las crisis, y más después de que su ex mujer se tirase a casi todo el vecindario, por ello solamente lo sabe Macu y posteriormente Eugenia. Cuando Chema entra por sorpresa en la casa a Soraya no le queda otro remedio que esconder el predictor en la mochila de Aidita, cosa que descubre el tendero y le regala una caja de condones a la muchacha. Sin palabras ante este hecho. Cuando Soraya descubre lo que ha hecho su Cheminovio no le queda otra que hablar con él y finalmente se resuelve que no está embarazada, incluso está a punto de hacer una fiesta porque le ha bajado la regla pero todo se queda en una absurda canción.

Simón resulta que es un timador nato y Esperanza Sur es el sitio ideal para llevar a cabo las fechorías. Aparecen bastantes carteles por el barrio con un collar perdido y una gran recompensa y cuando Mauricio ve a Simón con el collar no duda en comprarlo a pesar de que el joven le saca más dinero del previsto. El problema le llega a Mauricio cuando se entera de que Macu y Eugenia también le han comprado el collar a Simón, es ahí cuando se percata de que hay un nuevo timador en el barrio. Después de una amenaza Mauricio ve un plan perfecto: crear un gran timo junto a Simón y Jonathan, éste último por hacer algo ya que no tenía gran cosa que hacer. La cosa consiste en una empresa que organiza bodas donde Mauricio sonsaca información a la novia, luego Simón se la camela con dicha información y se la tira en casa de Luisma, sigo sin comprender porqué todo el mundo entra y sale de esta casa sin ser suya y más aún sin que Luisma esté dentro, y para rematar el negocio Jonathan entrará cuando la novia y Simón estén en pleno tema para que le novio la deje y se queden con la fianza. La cosa sale bien dos o tres veces pero llega una en la que el novio saca una pistola y Simón tiene que salir por patas por la ventana del baño engañando a Mauricio para que suba, que es quién se lleva el balazo del novio celoso.