"Cabos sueltos"
El título del capítulo no podía ir más de acuerdo con la trama, ya que los cabos sueltos hay que atarlos y eso es precisamente lo que ha pasado a lo largo de éste episodio, pero vayamos por partes.
La semana pasada nos volvieron a dejar con la tensión de "morirá no morirá" y en ésta ocasión fue Nina la que ha estado a punto de ser asesinada por Ellen, aunque visto lo visto durante estos capítulos estaba más que claro que no la iba a matar. Ésto nos recuerda a lo rápido que pasan de estar a punto de morir como de seguir vivos, ya que la semana pasada con Duncan pasó lo mismo, te dejan una semana en vilo para luego resolverlo en menos de un minuto. Pero bueno, dejando de lado eso hay que decir que durante este capítulo, Ellen ha ido completamente a su bola. Así de la manga se saca que tiene que hacerle unos análisis al Presidente, y con toda su cara va y se los hace aunque falten seis días para la operación. Todo es una estrategia para sacarle sangre, pero la persona que está junto a ellos le pide la sangre y lo que ha utilizado ya que de eso se encarga la Casa Blanca, aunque consigue guardarse algo. Cuando le pasan los resultados de la sangre que ha conseguido llevarse a hurtadillas hata cabos y por fin tenemos algo de claridad. Nina es la hija del Presidente. Por eso Duncan está en todo esto, cuando muera el Presidente podrá salvarle la vida a su mujer, ya que el Presidente no sabe que la mujer está viva, ya que la mataría. Un cabo suelto menos.
Hoffman, el policía obsesionado, no obtiene respuesta tras interrogar a Brian sobre lo de la familia secuestrada. Aún así él esta erre que erre con que alguien quiere matar al Presidente, incluso está cerca de averiguar que alguien de la Casa Blanca está detrás de todo. El otro policía de la oficina y Duncan planean el asesinato, pero no sabemos qué misión tienen Sandrine y Kramer que se interponen, aunque no llegan a reconocerles. En resumidas cuentas que Hoffman se salva. Quentin sabe que en cuanto le pillen está acabado, por lo que hace un trato con el poli y le insta a que vaya a ver al fiscal federal, ya que parece ser el único que no está al corriente del plan. Pero cuando va a salir le pide ayuda a su compañero y éste se lo carga por el camino. Otro cabo suelto solucionado.
Quentin es el último cabo suelto que queda, por lo menos de momento ya que en esta serie hay tanta gente por ahí que puede que sigan desapareciendo más. Cuando se entera de que pueden cazarle Hoffman pronto intenta huir. Acude a reunirse con el policía para contarle todo si obtiene total inmunidad y bastante dinero, si no obtiene respuesta se largará. Está claro que siente que haga lo que haga va a terminar muerto. El Coronel es el encargado de darle la puntilla en una recepción a través de una copa de champan y la cuñada del Presidente se lo hace saber. La verdad es que me alegro de que Quentin haya muerto, era sumamente imbécil y estaba claro que solamente se arrimaba al sol que más calentaba, al menor problema ni ha tardado cinco segundos en irse.
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