"Amanece que no es moco"
Aída desde la distancia ha fastidiado las vacaciones de la familia. Cuando planeaba su huida robó el dinero que tenían reservado para las vacaciones, por lo que el único plan que tienen es irse al cine, donde Soraya ve como Chema se come un moco. A partir de ahí comienzan los problemas en la pareja. Soraya llama a la radio para contarlo y todos la animan a que siga con él, pero Chema continúa comiéndose los mocos. Soraya lo cuenta al barrio y todos ser ríen de él, por lo que decide comerse ella también uno para que le dejen en paz.
Mauricio recibe la visita de un grupo comunista y acepta que se reúnan allí fingiendo ser parte de ellos ya que le van a pagar por las reuniones que celebren allí. Pero la mentira no le dura mucho tiempo. Los comunistas deciden hacer vídeos de los locales de alrededor y los empleados de Mauricio, cansados de sus mentiras, graban uno por su cuenta mostrando como es el tabernero realmente.
Una trama absurda durante todo el capítulo ha sido la de Paz. Le encargan pasteles para una despedida de soltera y decide hacer penes, pero eso queda muy alejado de la realidad, aquello parecen espárragos. Para haber sido prostituta durante tanto tiempo parece que no ha visto uno en su vida. La sorpresa, cuando consigue hacerlo en condiciones, llega cuando descubre que no es para una despedida de soltera sino de una monja, pero las monjas se comen esos pasteles a gusto. Así se las gasta la iglesia.
Y por último tenemos a Luisma y Macu que esta semana han trabajado para alguien VIP, nada más ni nada menos que para Jesús Vazquez. El presentador de La Voz necesita la ayuda de Aidalai para limpiar su casa y los problemas llegan cuando en una visita guiada por la casa Eugenia se queda allí para que Jesús la enchufe en el programa.
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