"El hombre que olía demasiado"
A pocos capítulos para el final, Aída parece que se vuelve a poner las pilas como cuando se suponía que debía de ser su final hace unas semanas, además el final de éste episodio nos ha dejado bastante descolocados, para que negarlo.
Una antigua amiga de Soraya llega al barrio tras su paso por Nueva York y quiere conocer a Chema. Lógicamente, la amiga es una triunfadora que lo ha conseguido todo y Soraya no quiere presentarle al verdadero Chema, por lo que saca una nota del pasado y Simón tendrá que interpretar el papel de su novio. Algo perturbador nos parece que años después guarde aquel papel, pero es Soraya y parece que ya no está del todo bien de la cabeza. Llevamos tiempo con Simón por el barrio y ya nos podíamos imaginar que iba a sacar provecho de la situación, por lo que no duda en coger dinero de la tienda y alimentos caros para su beneficio. Sorprendidos se quedan los dos amigos al ver que el novio de la amiga es como Chema, pero más sorprendida se queda Paz cuando les ve darse un pequeño beso ante la insistencia de la amiga, y ya intuye la de la tetería que aquello no iba a terminar bien. En efecto, al final vemos como un tonteo en el portal termina con un apasionado beso, algo que si llega a ser al poco de llegar Simón al barrio agradeceríamos, pero a escasos capítulos del final la verdad es que no demasiado.
Doña Eulalia se ha ido de viaje y tras muchos años, Mauricio por fin está solo en casa, y de hecho por fin hemos podido ver dónde vive el tabernero. Lo que iban a parecer unos días maravillosos pronto se convierten en una tortura, ya que se da cuenta de que no tiene a nadie y echa mucho de menos a su madre, por lo que decide llamar al teléfono de la esperanza. Sorprendentemente es Chema el que atiende la llamada e intenta de ayudarle, cosa que no sale realmente bien cuando Mauricio se entera de quién está al otro lado del teléfono. Como era de esperar, el tabernero no tarda en aprovecharse de la situación hasta que ya no puede más con el patético de su amigo y termina confesándolo todo. Aunque bueno, a pesar de la humillación por la que le ha hecho pasar terminan pasando la noche juntos, viendo películas no penséis mal.
Fidel ha encontrado un chico que le gusta aunque parece que pasa de él, por lo que tendrá que hacer algo para entrarle por los ojos. Simón no tarda en darle consejos, para eso es el que se tira a todo lo que se mueve por el barrio, Macu también aporta su granito de arena. Lo increíble es que consigue conectar con el chico, pero tiene un serio problema, huele realmente mal y todo el barrio lo nota. Distante está Fidel y cuando ya no le queda otra no duda en romper con el chico, pero entonces descubrimos que huele mal porque tiene la ducha estropeada y para colmo deja al hijo del tendero porque piensa que es heterosexual.
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