"El poder de la persuasión"
Las cosas para los Sanders parecen ir más relajadas ahora que más o menos las cosas han vuelto a la normalidad, salvo por el hecho de que continúan secuestrados.
Jake se las ve con el tipo al que le debía el dinero de la marihuana. Después de pedirle de nuevo el dinero a su padre éste no se lo devuelve, por lo que el hijo se lleva una paliza. Kramer, uno de los secuestradores, quiere ayudar a Jake pero María no le deja ya que ese no es su deber, por lo que ambos se quedan observando la paliza. Después, vemos como Kramer pega al camello y le da el dinero que Jake le debe. Todo parece indicar que Kramer en su juventud fue como Jake, de ahí que sienta aprecio hacia el chaval.
Morgan le cuenta a su novio que está embarazada, por lo que él va a hablar con el padre pero se encuentra con Duncan, que finge ser Brian y le dice que se aleje de la chica. Cuando Morgan se entera de que "su padre" a alejado a Boyd no se lo perdona. Mejor que Duncan lo haya alejado porque si llega a hablar con Brian se hubiese acercado demasiado y podría acabar muerto, aunque no sabemos que pasará.
El Presidente quiere cambiar de cirujana debido a los problemas que ha habido, pero es algo que Duncan no quiere y por ello el ayudante tiene que convencerle. Filtrando a la prensa lo que pretende hacer su superior hace que el Presidente recule, pero la Primera Dama no lo tiene tan seguro, por lo que tienen que pasar al plan B: Ellen. La cirujana tiene que convencer a la mujer de su paciente y lo logra.
Ellen quiere saber más acerca de los secuestradores, ya que no saben absolutamente nada de ellos pero es que parece ser que entre ellos tampoco se conocen, y que mejor que escaparse un rato. La madre de familia finge que está operando y escapa del hospital para ir a ver a la hija del líder. Hablando con Sawyer descubre que Duncan es agente del FBI, por lo que le cuadran menos las cosas de por qué hace todo eso.
Brian, al enterarse de todo lo que le cuenta su mujer, sabe que no van a tener escapatoria una vez que el Presidente este muerto, aunque eso aún se va a hacer de rogar, por lo que prepara un plan de huida algo peculiar: él no va a ir con su mujer y sus hijos, algo por lo que Ellen no está dispuesta a pasar. Aquí es cuando Brian le echa narices y revela que tiene una relación con Samantha, su secretaria, así al confesarlo, Ellen le odiará y no dudará en irse con sus hijos, pero parece ser que tampoco le sirve a la cirujana para largarse.
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