"Y llegó ella"
Visto lo visto en los dos primeros capítulos, la serie bien podría pasar a llamarse "Ana & Alberto" ya que apenas dan trama al resto de personajes y mira que lo hay, pero deciden centrar casi toda la atención en estos dos y eso cansa.
En resumidas cuentas, ésta nuevo capítulo se ha centrado en la pedida de mano y en la ruptura de la pareja por el bien de las galerías. Ya veíamos que todo iba a toda leche en el primer capítulo, pues también ha pasado en el segundo. Cuando Ana no está recuperada del todo, Alberto decide declararse e ella lógicamente acepta. Todo muy bonito hasta que salta la noticia de que las galerías están en la ruina. El nuevo dueño solo encuentra una persona dispuesta a prestarle el dinero es el padre de Cristina, pero solo se lo da si se casa con su hija, que hay que ver lo cansina que es la pobre. A pesar de que no quiere ni a tiros para poder estar con su querida Ana, es ella la que le da la patada por el bien de todos los empleados. Es aquí cuando ya no le queda otra que casarse con la Otegui pero con la promesa de Ana de fugarse juntos cuando todo se solucione. Algo nos hace sospechar que vivirán un romance en las galerías a espaldas de todos, pero resulta que para no sufrir otra vez, ya que le toca arreglar el vestido de Cristina, Ana decide largarse a otro taller. Tenemos la garantía de que volverá porque sino la serie está visto que no tendría ningún sentido.
En los talleres la cosa funciona con normalidad y poco vemos, ya que se centran en los otros dos, pero lo que vemos ya se intuía con el primer capítulo. Rita se lanza a la aventura y besa a su cuñado Pablo, pero deciden correr un tupido velo y hacer como que nada ha pasado. También tenemos Luisa, que sigue entrando y saliendo de las habitaciones a hurtadillas para que Doña Blanca no la pille, pero resulta que la pilla Don Francisco y pide su readmisión, está claro que la quiere cerca y cuanto más mejor. Y por último tenemos a Clara, que decide presentarse al puesto de nueva secretaria y a pesar de no tener mucha idea es seleccionada para el puesto, cosa que se encarga de elegir Mateo y ya nos podemos hacer una idea de por dónde van a ir los tiros. También vemos como Emilio hace unas pruebas para contratar a un nuevo dependiente, que si están con el dinero justo no se qué hacen contratando gente si tienen de sobra. Aquí es donde hace su aparición Maxi Iglesias, un actor que no me transmite absolutamente nada en los papeles que he visto suyos, ya veremos si en Velvet cambia pero permitirme dudarlo.
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